Wednesday, June 28, 2006

NUESTROS ABUELOS NOS INVITAN A SU MESA


       La globalización podría dejarnos sin comida. Nuestro afán de copiar ha hecho cambiar nuestros hábitos alimentarios. Siguiendo esas pautas hemos ido de lo mejor a lo peor. Así, en lugar de comer bien hacemos lo contrario y lo que es más triste, no lo disfrutamos. Recuerdo que antes ir a la mesa era un relajo, un placer.
            Hay iniciativas privadas, que por su trascendencia, deberían convertirse en políticas públicas, como por ejemplo, la alimentación saludable. La Universidad Católica, la Asociación Chilena de Seguridad y Dole, empresa productora de hortalizas y frutas, firmaron un acuerdo para recuperar la alimentación mediterránea en nuestro país. Esto es una dieta abundante en ensaladas y la comida casera tradicional.
      Chile perdió esa costumbre de nuestros ancestros y hoy la obesidad, por el desorden alimentario, es el mal de la modernidad. Por su ubicación geográfica, nuestro país, dispone de alimentos de naturaleza mediterránea, igual que California, el sur de Australia, Sudáfrica y la cuenca del Mediterráneo.
     Estudios médicos descubrieron hace cincuenta años que los países bajo ese régimen de comidas presentaban menos enfermedades y eran longevos. Y se determinó que la razón era su dieta, que se denominó mediterránea. Pero, con la globalización Chile fue perdiendo el hábito y derivó en lo que es hoy: mucha comida chatarra y porquería.
    Una estrategia privada para recuperar nuestra tradición es entregar dietas mediterráneas en los casinos de las empresas. De esta forma serán los trabajadores los que experimentarán los saludables resultados, menos obesidad y menos problemas vasculares. Así serán ellos los que lleven el hábito a sus casas y de esa forma, se espera que nuestra población vuelva a nuestras ricas y recordadas comidas antiguas.

No comments: