Thursday, October 10, 2019

VIOLENTA ES LA BURLA DE LOS RICOS

Imagen copiada de The Clinic.

          La risa no es una manifestación de felicidad, sino de violencia. Porque quien se ríe, se ríe de alguien. Y, lo más curioso de la risa está en la cara que pone el que se ríe: muestra los dientes, igual como en la naturaleza hacen los animales en actos de agresión. Y es interesante también observar que los animales no ríen, ésta es una característica sólo de la especie humana. Mi comentario se basa en anotaciones de filósofos modernos como René Girard, por ejemplo. Esta idea de la risa y el presente (estoy escribiendo el 10 de octubre de 2019) apunta a tres desaguisados: bromas estúpidas dichas para reírse, o sea, para agredir. No logro entender los chistes pronunciados por personas que no deberían usar este recurso ramplón en tiempos de muchas dificultades para millones de personas. Quienes se atreven, porque les da lo mismo, están en las más altas esferas de la conducción del estado.
           Veamos los casos concretos. Primero, el ministro de economía Fontaine dijo en una salida de tono humorístico frente al alza de los pasajes en el transporte, que para ahorrar había que levantarse más temprano (por cierto que más temprano, que lo que hace un trabajador común y corriente que ya es bastante) y aprovechar la rebaja «valle» antes de la hora «punta». Dicho esto, risas, risas…
               Un segundo caso hay que ubicarlo en Hacienda; el titular de ese ministerio Larraín dijo que los románticos deberían aprovechar que el IPC arrojó una baja en los precios de las flores (porque todos los otros artículos fueron al alza) y regalar ramos a las personas de sus amores. Dicho esto, risas, risas…
            Y la tercera broma la gastó el presidente de la república, Piñera. En un encuentro con un grupo de niños en la casa de gobierno, les dijo en son de broma que si ellos arrojaban monedas a la fuente de agua de uno de los patios del palacio, ellos podrían regresar algún día, como afirma la costumbre. Y les dijo algo más o menos así: «Ustedes lanzan las monedas a la fuente y yo voy y las recojo». Dicho esto, risas risas.
            Estos tres ejemplos demuestran en nuestra realidad aquello que afirman los filósofos que la risa es violencia, en este caso, del poderoso hacia el indefenso. Es una lástima que el dolor de los más, sea motivo de escarnio de los privilegiados. Igualmente viene al caso afirmar que no se trata de falta de sentido del humor. Es que el terreno del sacrificio y las estrecheces no da para posturas humorísticas.    

No comments: