Monday, January 31, 2011

LA NATURALEZA NO ES LA RESPONSABLE DE LA SEQUÍA



Veo en la televisión y leo en los diarios acerca de la sequía que nos afecta. Dicen que en Illapel ya no hay agua, observo los muelles sobre terreno seco del embalse Rapel y leo que por ese motivo hay riesgos de suministro de energía eléctrica para Santiago.


Mi interpretación de este fenómeno, que no es nuevo, es que detrás del problema estamos nosotros mismos o mejor dicho, las empresas. Los medios hablan de la sequía pero no investigan ni dicen que parte del fenómeno lo hemos creado nosotros. Es cosa de ver que el crecimiento económico se refleja en el mayor número de hectáreas sembradas, en el aumento de la demanda de la energía, en el incremento del consumo de agua potable. O sea, estamos estirando el elástico al límite. Le exigimos a la naturaleza más allá de las realidades. Los ecologistas dicen, con razón, que el crecimiento no puede ser infinito en un mundo cerrado. Hay barreras, que no estamos considerando racionalmente.


El fenómeno de la sequía se resuelve con un par de aguaceros, que nos pudiera brindar generosamente la naturaleza. Pero, no somos previsores. Si hemos de aumentar la superficie agrícola para exportar, si demandamos más electricidad para la producción y necesitamos más agua potable para procesos industriales, claro que nos vamos a quedar secos. Porque exigimos y exigimos al medio ambiente. Nuestros legisladores no se han dado cuenta u otorgan manga ancha. Una sociedad decente, que respete el entorno, debe considerar que para crecer hay que tener agua. Es decir, tenemos que conseguirla antes de plantar, antes de generar corriente.


Lo más lamentable de esta situación es que mientras más sequía haya, mientras más necesitemos energía eléctrica, los ejecutivos de Hidroaysén se regocijan y sonríen diciendo que en la undécima región tenemos toda el agua que queramos para disponer de más corriente. Ellos vuelven al uso del agua para ese fin. No han creado nada nuevo. No han investigado alternativas. Ellos van por lo más fácil: usar a discreción los recursos libres de la naturaleza para ganar dinero, con toda seguridad, hasta agotarlos.

1 comment:

Liou Duvinini said...

Interesante...