Friday, March 13, 2009

CHILE Y EL MEJOR GOL DE SU HISTORIA, HASTA AHORA

     Nuestro mejor gol de la historia, el que convirtió Eladio Rojas el 16 de junio de 1962, en el estadio Nacional, contra Yugoslavia, con el que Chile obtuvo el tercer lugar en un Mundial de Fútbol, fue logrado gracias a que el balón rebotó en un adversario, hecho que modificó su trayectoria y descolocó al arquero.
   Y es el mejor de nuestra historia por la tremenda emoción que despertó en ese momento y, hoy en día, porque los protagonistas ya no están: Eladio murió y Yugoslavia se disolvió.
     Recuerdo ese día de 1962, todos pegados a la radio oyendo el relato más o menos en estos términos:
    «Señoras y señores, esto se termina en cualquier momento. Chile-Yugoslavia cero a cero. Todo indica que habrá alargue para definir el tercer puesto. Pero, Chile está en desventaja, con tres jugadores lesionados. Yugoslavia se ve más entero físicamente. Toma la pelota Chile. La tiene Eladio Rojas avanza en campo adversario. El árbitro mira su reloj. Dispara Eliado Rojaaaaaaaas. La pelota roza en Markovic y gooool. Grande Chile, hemos conseguido el tercer lugar en el Mundial».
       El mundo se vino abajo en el Nacional y Chile entero celebró hasta el día de hoy. La prensa informó y el gol de Eladio Rojas se internalizó en la memoria colectiva, con la ayuda, por cierto de los comentaristas deportivos.
     TVN publicó hace tres días imágenes inéditas del Mundial de 62, que estaban perdidas y que muestran, desde un ángulo muy interesante el gol de Rojas. Si usted ve la escena con detención verificará que el disparo del jugador chileno fue muy violento, porque la agarró «llenita» pero con trayectoria previsible por la gran distancia. El curso de la pelota parecía ir para afuera. Sin embargo, tocó en el cuerpo de Markovic y retomó el curso hacia el arco sin perder fuerza. Descolocado el meta Soskic no pudo interceptar esa pelota envenenada. Al ver la imagen, recordé el relato del locutor. Markovic se tomó la cabeza a dos manos sin saber dónde meterse.
     Todos los honores para Eladio Rojas, quien disparó el último cañonazo en ese partido para convertir el tanto y colocar a Chile en el podio de los ganadores. 

Monday, March 02, 2009

NUESTRA ADMIRACIÓN POR FARKAS


    Farkas era la sensación. El público quería verlo, los que estaban lejos tenían que conformarse con oírlo. El ídolo poseía grandes talentos. Farkas era un tipo inspirador, su presencia irradiaba una magia cautivadora.
   Desde muy joven descubrió sus habilidades para el fútbol y pronto lo matriculó el Vasas, el poderoso club húngaro, cuando el fútbol de Europa del Este irradiaba una tremenda imagen en esta parte del mundo.
      Farkas estuvo en Chile para el mundial de 1962, oportunidad en que deslumbró por la calidad de su fútbol. Rápido, inteligente, agresivo, tales eran en líneas generales sus mejores virtudes. El fútbol húngaro era entretenido y lleno de sorpresas. En Chile la prensa hablaba del estilo húngaro y a muchos futbolistas locales les gustaba y calzaba el apelativo de húngaro.
       János Farkas (foto) nació el 27 de marzo de 1942, por lo que a la fecha tiene 67 años. Su nombre está grabado en distintos lugares del mundo, hecho que refleja la calidad y el halo de estrella del jugador.
     Seis años después del mundial, en 1968, en Talcahuano se creó un club deportivo y social que lleva por nombre János Farkas. Su imagen había calado hondo entre admiradores chilenos y un porteño lo propuso para ese club y como un homenaje al astro húngaro.
     El año pasado los choreros celebraron los 40 años de fundación de club Janos Farkas, todo un baluarte en Talcahuano.
   El ex jugador fue un auténtico astro, un Farkas modesto, talentoso y nada de extravagante.